EL PUEBLO DE JAFRE

El lugar aparece documentado ya desde el 1139. El 1143 Ramon Guillem lega el loco de Jafre a su hijo Pedro y en 1332 se menciona un "Castillo de Jafre". En una población del siglo XIV se recoge un solo fuego (o vivienda) y en 1413 se indica que la iglesia de Santa María ya no tiene razón de ser porque en el pueblo no queda nadie con vida. Al 21 de agosto de 1432 se estableció la unión perpetua de la iglesia de Jafre con la de San Félix de Olivella: actualmente, la parroquia de Olivella lleva el nombre de "San Pedro y San Félix de Olivella y Jafre ". 

El señor de Jafra poseía ya a principios del siglo XIV el título de barón. En el siglo XVII, los varones de Jafra deciden dar nuevo impulso al pueblo y nombran un alcalde (Francisco Mercer, en 1683) y en restauran la iglesia. La baronía de Jafra tenía aún en 1790 término propio.

En 1819 Jafre pierde el último alcalde y se incorpora definitivamente al pueblo de Olivella, seguramente debido a los vínculos parroquiales mencionados. La economía tradicional de la cuadra de Jafra se basaba en la leña y los pastos. Hacia el XVII se intensificó el cultivo de la vid. La filoxera (1879-1880), pero, causará el progresivo abandono de las tierras. Jafre aún tenía 19 habitantes en 1960.
El pueblo había tenido varias masías, muchas deshabitadas actualmente, como los «Masets de Jafre», y otros aún con vida, como el «Mas Mercer (o Marcer, la Fassina (que acoge la entidad" Jafra Natura ", dedicada a la difusión del conocimiento del Parque Natural del Garraf "y la Plana Novella, actualmente con un monasterio budista. la riera de Jafre es un afluente y tributaria de la riera de Begues (riera de Ribes en su tramo final).
La señoría de Jafre estaba vinculada al castillo del mismo nombre y en las tierras que la rodeaban. Sus propietarios fueron, a lo largo de los siglos XIII y XIV jueces o alcaldes reales de Vilafranca del Penedès, y en 1332 (al menos) ya tenían el tratamiento de varones. En 1365 el barón era Bertran dez Coll, y el título perteneció a la familia Bertran, hasta que por enlaces matrimoniales pasó a Catà (siglo XVIII) y sucesivamente a Martí, a los Papiol (1717), la casa de los que es ahora el Museo Romántico de Vilanova y la Geltrú, y los Torrents (1817). 
Se cuenta que, en 1714, el entonces barón de Jafra acogió Rafael Casanova, herido (y buscado por los vencedores filipistes) en una casa que tenía en Barcelona, ​​primero, y -cuando la investigación se calma- al palacete que los Jafra tenían cerca de la iglesia parroquial de Sant Boi de Llobregat. 

Al llegar por la carretera, nos encontramos con esta prime casa bastante grande cerca del pueblo de Jafre y la curiosidad nos llama al explorarla y a poder capturar algunas imágenes de la misma.

Solo a mirar el exterior se puede mirar su tamaño, el tamaño que en los años antes mencionado donde una época las familia vivían en casa que parecían mansiones, podemos abrirnos los ojos entrando en ella.

Todo esta derribado, solo la mitad de la estructura se queda en pie y el anterior casi no existe claramente pero nos da la idea de como era antes.

De este pueblo leyendo por los bloog en Internet y gente que conoce un poco su historia, leyendo algunos articulo en la red, puedo decir que entendí que cuenta la leyenda que hace cerca de un siglo, una familia de origen austríaco y adinerada, se trasladó a una Masía abandonada que se encontraba alejada del pueblo más cercano, en este caso Jafra en el Garraf.

Empezando a saber esto puedo escribir este relato para vosotros, relato que ice mirando una web y la otra, recogiendo  piezas y reuniendo los hilos os puedo escribir lo siguinete.:

De lo que se sabe de esta familia es que no era muy sociable con la gente del sitio y de hecho no permitían a los hijos salir del sendero y tampoco dejaban entrar a otras personas en su propiedad.

El motivo del comportamiento de la familia estaba debido a que sus hijos se habla que tenían una enfermedad en la piel y al parecer los padres no querían que nadie los viera. 
En ese tiempo el padre, quien decidía la medicina, mandó a construir un jardín para que sus hijos pudieran jugar, la obra se construyó en tres años y fue obra de un Arquitecto de renombre en aquel entonces (Jean-Claude Nicolas Forestier) y el jardín consistía en un enorme laberinto de árboles y arbustos, hecho exclusivo para sus hijos. 
La leyenda comienza cuando la madre dio a luz a su cuarta hija, la cual llamaron Melinda. El parto fue dentro de la Masía y la madre murió esa noche. Desde ahí comenzaron a suceder sucesos extraños. Los otros hijos fueron muriendo uno a uno, (se atribuye a la enfermedad que tenían). 
El padre empezaba a sentirse angustiado por el echo que se quedaba solo Melinda y el con vida.

Una noche de Octubre, Melinda a sus seis años huyó al jardín, perseguida por su padre completamente enloquecido. Dice la leyenda que la niña se cayó al pozo del jardín y nunca más se supo del paradero de ella ni del de su padre. 
Es por eso que se dice que en los bosques del Garraf se aparece el fantasma de Melinda, quien ayuda a los visitantes que se encuentran extraviados y les señala el camino, para ayudarlos a escapar de las garras de su malvado padre. 

Sitges se menciona mucho también de una niña que se aparece en las curvas del Garraf. Esta es la historia que hace referencia a la chica de la curva, pero algunos dicen que se trata de la niña Melinda.

INTERIOR DE LA IGLESIA

INTERIOR DE LA IGLESIA 2

Este sitio, este pueblo, es verdaderamente interesante y curioso.
Os lo consejo sea para hacer un buen paseo, sea para tomar algunas foto interesante y para descubrir uno de los muchos pueblo abandonado que hay en Catalunya como en el resto de España.
Jafre, pueblo de misterio, pueblo de historias, pueblo que os recomiendo y que espero que este reportaje haya sido de vuestro agradecimiento.